Freddy Ramírez Mora| Escuela de Computación del TEC | boletinclic@camtic.org

La tecnología de información ha presentado en las últimas décadas avances significativos y revolucionarios en su poder computacional, lo cual ha permitido su expansión hacia aplicaciones de diferentes tipos, siendo su incorporación en las organizaciones uno de ellos, hasta el punto de volverse un factor crítico de éxito en la atención de sus aspectos estratégicos, generando un nivel de dependencia incuestionable.

En lo que referente al sector público costarricense, la incorporación de las tecnologías de información y comunicación para el cumplimiento de sus pilares estratégicos ha sido significativa, aspecto que se ve reflejado tanto en la rigurosidad de las normativas técnicas desarrolladas para su gestión, así como en la relevancia que le brindan los múltiples indicadores de evaluación institucional a los que están sujetas las instituciones públicas en la actualidad.

A lo largo de los últimos 20 años las instituciones del sector público costarricense han sido impulsadas a incorporar mejores prácticas para la gobernabilidad de las tecnologías de información por parte del máximo ente fiscalizador del país, a saber la Contraloría General de la República. Los esfuerzos desarrollados en esta línea por parte del ente fiscalizador han procurado en un sentido amplio promulgar normativa técnica que apoye a la administración de las instituciones públicas a mejorar la prestación de sus servicios, ser eficiente en la inversión de los recursos asignados a proyectos que utilizan tecnología de información e impulsar un avance significativo en la madurez de la gestión de la tecnología de información, aspectos que no necesariamente se han materializado en las instituciones públicas costarricenses.

Los estudios realizados a la fecha no reflejan un alto nivel de madurez, en lo que respecta a la gobernabilidad de tecnología de información en las instituciones públicas, según lo demuestran los informes presentados por la Contraloría General de la República en sus publicaciones periódicas relacionadas con el índice de gestión institucional, aspecto que se ha mantenido durante varios años”.

Complementariamente, en años recientes se han desarrollado una serie de indicadores de evaluación para las instituciones públicas costarricenses entre los que se destacan: la evaluación de la calidad de la prestación de servicios públicos por medios digitales, el índice de competitividad cantonal, el atlas del desarrollo humano cantonal de Costa Rica, el índice de transparencia del sector público costarricense y el índice de progreso social. Éstos han sido desarrollados por varias organizaciones, generando indicadores dependientes y/o relacionados con la utilización de la tecnología de información, que no necesariamente presentan los resultados mínimos esperados.

Los resultados obtenidos denotan además, un conjunto de cuestionamientos significativos respecto a la madurez en la gobernabilidad de tecnología de información, el nivel de cumplimiento regulatorio y el apoyo real con que cuenta la estrategia institucional por parte de las tecnologías de información, la cual no es la adecuada en lo que respecta a un máximo aprovechamiento de los beneficios que éstas pueden brindar en el desarrollo de las funciones y servicios que se les han conferido.

Ante lo anterior, es de suma relevancia la identificación de una estrategia que permita atender los aspectos de gobernabilidad de tecnología de información en las instituciones públicas, lo cual puede ser la causa principal de los resultados generados por los indicadores mencionados, ya que podemos concluir que la gestión inadecuada de dicha gobernabilidad está provocando una atadura para el mejoramiento integral en los mismos, provocando adicionalmente aspectos negativos en la calidad de vida de los ciudadanos que consumen los servicios ofrecidos por las instituciones públicas e incrementando la probabilidad de materialización de aspectos contraproducentes de la gestión adecuada de los recursos públicos.

Los beneficios asociados a la incorporación de las tecnologías de información a las instituciones del sector público costarricenses son innegables, sin embargo su presencia con lleva de manera inherente una serie de riesgos, producto de las inversiones en las que se requiere incurrir para su utilización, así como la necesidad de contar con el conocimiento para su desarrollo, aspectos que provocan la necesidad de concebir una estrategia integral para su gobernabilidad de forma inmediata, la cual permita obtener el valor que se espera de las mismas bajo una eficiente administración de los recursos destinados a ellas.